La planta de Noáin, de Mitsubishi, factura en este año 100 millones, frente a los 80 de 2013. Fabrica 22 carretillas elevadoras al día y cuenta con 200 trabajadores
Íñigo Gomariz Díaz, director general de Unicarriers Manufacturing Spain y vicepresidente para Europa, en la planta de Noái.
El daruma ya tiene ojo. Cada vez que se lanza una nueva carretilla elevadora los japoneses mandan un daruma a la planta, una figura con una cara sin un ojo. Lo llevan a la línea de producción y pintan el ojo que falta como un certificado de que ya está lista la carretilla. Así ha ocurrido con el último modelo fabricado en Unicarriers Manufacturing Spain (la antigua Nissan Forkflit), en Noáin. En esta carretilla, TX, la empresa ha invertido cinco millones de euros durante 2017, año en el que se empezó a comercializar en julio.
Desde entonces, han vendido hasta la fecha 2.100 unidades. Esta nueva máquina eléctrica mejora la calidad, la seguridad, el confort, la autonomía, reduce el ruido, consigue mayor visibilidad y es más fácil su manejo, según explica Íñigo Gomariz Díaz, director general de UniCarriers Manufacturing Spain y vicepresidente de Unicarriers Europa.
Estas son algunas de las casi 5.000 carretillas elevadoras que fabrica al año la planta de Noáin, propiedad desde 2016 del japonés Mitsubishi. Pero tiene capacidad para llegar a las 60 por día. “Ahora fabricamos 5.000 a un turno, con una capacidad de 6.500. Si pasáramos a dos turnos podríamos fabricar hasta 13.000 al año. Estamos muy lejos de nuestro tope de capacidad”, añade el directivo. A pesar de esta capacidad de crecimiento que todavía tiene la firma, los números de facturación y producción han ido aumentando en los últimos siete años, fruto de la recuperación de la economía, según Gomariz. “Nuestro sector es un termómetro claro de cómo funciona la economía”, añade.
El crecimiento de los últimos años se plasma en la evolución de una facturación de 80,8 millones de euros en 2013 a los 100 millones que ingresará en 2018 y de las 4.015 carretillas fabricadas a las 5.000 para este ejercicio (el año fiscal termina en abril).
Esta evolución se ha hecho con una plantilla estable, 200 trabajadores en este ejercicio. “Después de la crisis tuvimos que adaptar nuestros procesos y productos a la demanda del mercado. Regularizamos el número de trabajadores con jubilaciones parciales y contratos relevos. Por eso no ha habido incremento de plantilla porque veníamos de ajustarla”, explica Gomariz.
PARA EUROPA, ÁFRICA Y ASIA
Las carretillas que fabrica esta planta desde 1989 van destinadas en su mayoría a la exportación. Desde Noáin se fabrica para toda Europa y se vende también a África y Asia. El 20% de la facturación procede del mercado español, “lo que quiere decir que la cuota de mercado nacional es altísima”, explica. El 11% procede de Inglaterra; el 12% de Francia; el 6% de Alemania; el 5% de Holanda… y en menores porcentajes se venden en Costa de Marfil, Rusia, Israel, Austria…
Íñigo Gomariz destaca del producto de Unicarriers su variedad, personalización y adaptabilidad a las necesidades del cliente. De las 143.000 carretillas fabricadas desde 1990, el 80% ha sido diferente. Desde el color (ha habido carretillas rosas), a la altura, a la carga que pueden levantar (desde 1,25 toneladas a 5 toneladas), con cabina o no, radio, tipo de ruedas, cabina cerrada o no… Los modelos son de combustión interna (diésel o gas) y eléctricas.
ADIÓS AL DIÉSEL
Íñigo Gomariz ve el futuro con optimismo, por la configuración del nuevo grupo Mitsubishi y las posibilidades de crecimiento. Pero también es consciente de que existen ciertos peligros para los próximos años. Uno de ellos procede de la nueva regulación europea de emisiones para motores diésel. Entra en vigor en enero de 2019 y hay un periodo de transición de 18 meses para la fabricación y de 24 meses para la venta. “Quiere decir que a partir de 2020 no se van a poder vender las actuales carretillas diésel y las nuevas que aparezcan van a tener un incremento de precio que repercutirá en una dramática caída de las ventas”, advierte el directivo.
Esta regulación afecta a Unicarriers porque el 35% de sus carretillas que fabrica tiene motor diésel. La estimación es que, por el aumento de precio, este porcentaje pase al 5%. “Nuestro reto es que ese 35% de clientes que compra diésel se pase a las carretillas eléctricas o de gas. Y tenemos el reto de adaptarnos. Mi labor en este tiempo que llevo con esta responsabilidad es tratar de incrementar la producción con los cambios, la adaptación de diésel a la energía eléctrica o gas”, comenta.
Origen. En 1958, la navarra Motorización Agrícola inicia su actividad de maquinaria agrícola. En 1966 forma parte de Motor Ibérica. En 1980 pasa a Nissan, que en 1989 empieza a fabricar carretillas elevadoras. En 2013 pasa a ser Unicarriers Manufacturing. En 2016 pasa a ser propiedad de Mitsubishi.
Proveedores navarros. Compra 19 millones de euros navarros, tanto de producción como de servicios.
Mitsubishi Logisnext. Es la división, 100% de japonés Mitsubishi, del grupo donde se encuadra la planta de Noáin desde 2016. Esta división de elevadoras y carretillas, el tercer grupo del mundo, cuenta con 14 fábricas: España (Noáin, Unicarriers), Suecia, Finlandia, China (4), Tailandia, Japón (4) y EEUU (2). Y tiene 11.000 empleos.
De becario a director general y vicepresidente en Europa. Entre un cargo y otro 23 años. Son los que ha vivido Íñigo Gomariz Díaz (Pamplona, 3 de abril de 1970) en la planta de Unicarriers en Noáin, donde entró en 1995, al poco de terminar sus estudios.
Este directivo, casado con Silvia Sagüés González y con dos hijos de 14 y 11 años, estudió en el colegio San Ignacio y pertenece a la tercera promoción de la carrera de Ciencias Económicas de la Universidad de Navarra. Además, tiene un MBA en dirección de empresa, impartido por EDAE y expedido por la Cámara de Comercio. El mundo de la empresa le viene de familia porque Industrias Gomariz fue fundada por su padre.
Al terminar sus estudios se marchó a Londres unos meses y a la vuelta, en 1995, el plena crisis, vio un anuncio en el periódico. Pedían un licenciado en económicas para el departamento financiero en lo que era Nissan Forklift. Hasta hoy. Ha ido ocupando diferentes puestos en la empresa, la mayor parte de ellos relacionados con el área financiera, y ha estado involucrado en diferentes proyectos empresariales. Ha sido responsable de tesorería, ‘controller’ de la empresa y director financiero. Hasta que a finales de 2017 fue nombrado director general de Unicarriers Manufacturing Spain y vicepresidente de Unicarriers Europa.
Una de las cosas que más le sorprendió cuando entró en la empresa y que dice que sigue llamando la atención hoy en día a cualquiera que llega es la organización y el orden. “Todo está totalmente medido y organizado”, dice. Él, que viaja una vez al año al país nipón, apunta que son cosas de la cultura japonesa, de la que habría mucho que aprender, añade.
