– No tienen las empresas, patronales y sindicatos muy claro lo que quieren. – Una plataforma quiere una bajada de salarios del 20% en 3 años.
La ministra tiene otro frente abierto e interviene preventivamente antes de los paros anunciados ha convocado a sindicatos y patronales esta tarde en Fomento. El problema es la negociación de los convenios que ha puesto en pie de guerra a los sindicatos. Aquí se revisa el fondo de la cuestión. En la foto de izqda. a dcha. la ministra, Emilio Cardero de UGT, Mario Martín de CCOO.
Los sindicatos CCOO y UGT han convocado paros para la segunda quincena del mes de marzo.
Esta convocatoria se debe, según los sindicatos, la negativa de la patronal a firmar convenios colectivos. Especialmente el de Madrid y el de Barcelona, que dejarán de estar en vigor en julio.
Los sindicatos, previendo una batalla dura sindical, prefieren presentarla antes de Semana Santa porque después el tiempo corre rápido y el calor aplaca el ánimo guerrero. Ante esta convocatoria de huelga, la ministra apagafuegos, Pastor, ha convocado a los empresarios y sindicatos a una reunión el lunes 4 de marzo en la sede del ministerio. Allí acudirán, una vez más, todas las asociaciones de transporte y la logística y los sindicatos principales del sector.
Evidentemente la convocatoria de una nueva huelga alarma al ministerio de Fomento. Aunque el conflicto está en sus etapas iniciales y es una cuestión más de la continuidad de la figura del convenio colectivo, que de problemas puntuales por algún aspecto concreto, el tema es importante. La reforma laboral va a hacer que según vayan caducando los convenios colectivos a lo largo de este año, estos se extingan y queden si efecto.
Esto significa que las condiciones laborales que regiran en las empresas, salvo que estas tengan un convenio de empresa, serán las que rijan el Estatuto de los Trabajadores, ET.
La realidad es que a lo largo de los años, las condiciones de los convenios colectivos son mucho más ventajosas que las que fija el Estatuto de los Trabajadores, ET. Como además los convenios colectivos hasta ahora obligaban a todas las empresas de su sector, las condiciones bajo las que se rige la situación laboral son muy superiores a las que fija el ET.
Por ejemplo, en cuestiones salariales no hay convenio que no fije un salarios de entrada de alrededor de los 1.000 euros cuando el salario mínimo interprofesional está alrededor de los 700. El ET fija muy pocos complementos y obligaciones como son la antigüedad, días de vacaciones por encima del mínimo legal, etc etc. La reforma laboral significa que si no hay acuerdo los trabajadores perderán estos derechos. Por tanto el problema va a ser importante ya que dista mucho las posiciones entre los sindicatos y los empresarios. Se da las siguientes circunstancias que dado lo novedoso de la ley no tienen las empresas, patronales y sindicatos muy claro lo que quieren. Los sindicatos si tienen claro que quieren renovar los convenios de alguna forma, cediendo lo menos posible.
En principio los sindicatos están dispuestos a ceder congelación salarial a cambio de que se renueven los convenios. Entienden de que la situación económica es mala, están dispuestos a subidas mínimas o congelaciones salariales en los próximos años.
El empresario está aún más fraccionado y dubitativo en qué es lo que desea de esta nueva negociación laboral. No hay empresario, patronales ni asociaciones que propongan que se vuelva a los mínimos del Estatuto de los Trabajadores como base salarial y de complementos en las relaciones laborales. Pero si quieren cambios y profundos.
Una gran parte no consideran políticamente correcto defender plataformas de importantes reducciones salariales, y están a la expectativa de ver que es lo que pueden ofrecer los sindicatos, que evidentemente no va a ser nunca eso. Las patronales de transporte también se hayan divididas por la naturaleza de los intereses que defienden, no es lo mismo paquetería, operación logística o cargas completas, en cuanto a que desean de este proceso.
Algunos desean que haya, por ejemplo, más categorías salariales para permitir sueldos de entrada menores en los convenios, por ejemplo, donde haya una clasificación de carretillero que haya otras categorías como auxiliar de carretillero, asistente de carretillero, que permitiesen unos sueldos de entrada en los convenios menores. Por contra, otras patronales del sector de carretera lo que quieren es plantear a los sindicatos una rebaja de las tablas salariales en los próximos años. Estas propuestas que no se han llegado a formular, por ejemplo desearían una bajada en la parrilla salarial del 20% en los dos años. Impensable plataforma para los sindicatos, pero aclaratoria de que es lo que podría plantear la patronal. Este planteamiento está muy lejos por cuestiones de corrección política y la negociación de las convenios se va a enmarcar de una compleja negociación sobre complementos a recortar, dietas y la entrada de nuevas categorías que ofrezcan un abanico más amplio a las empresas.
En suma, como siempre en el panorama laboral español, esto solo va a conducir a hacer más complejas las relaciones laborales, a añadir tipos de contratos y categorías a un abanico ya muy amplio y desesperantemente complejo para las empresas. Terreno abonado para que puedan obtener beneficios las empresas de trabajo laboral, los abogados especialistas en mercado laboral y los piratas o los incumplidores que aplique las nuevas categorías o los nuevos convenios de una forma más o menos ventajosa para ellos. Por lo tanto al reunión de este lunes va a ser una toma de contacto y la ministra Pastor hace muy bien en forzar una agenda porque la situación era de total impasse porque los empresarios no están muy de acuerdo en aquello que quieren pedir y con poco incentivo para plantear negociaciones de convenios y los sindicatos impacientándose y poniéndose nerviosos de ante mano convocan paros para negociar.
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