El plan de ayudas para comprar camiones llamado Pima porque va a tener que ver con el achatarramiento de vehículos Euro 4 y más antiguos, pero también llamado Plan Renove por otros, está sumiendo de confusión al sector.
Las cifras que ha dado el Gobierno el viernes pasado no cuadran. Ha anunciado 200 millones del Banco Europeo de inversiones, más 200 que apartará el Gobierno, lo cuál daría una cantidad de 400 millones de euros para los vehículos industriales, que se entiende que comprendería también las furgonetas.
Sin embargo si bien los 200 millones del BEI están claros y son para financiación los 200 millones que anunció desde el gobierno no se sabe donde están. Fuentes de Anfac admitieron ayer a este medio que no hay nada concreto todavía. Fomento tampoco aclara mucho ya que admiteque una cosa será el programa de financiación y otra el de achatarramiento.
En la financiación al aparecer entrarán las financieras de marca pero se habla de fomentar la producción, lo que introduce la incógnita si serán para camiones producidos aquí, objetivo que se ha desvelado como ya se comentó en este medio hace días.
En la misma nota del Consejo de Ministros habla que con eso se iban a financiar 2.500 vehículos, cifra a todas luces insuficientes porque si fuese así se habrían casi regalado los vehículos ya que con esos 400 millones de euros, saldrían muchos mas vehículos a financiar. Evidentemente han fallado los ceros en los vehículos a financiar, a la Vicepresidenta del Gobierno señora Sáenz de Santa María y al Ministerio de Industria que le ha pasado los datos.
Si tenemos en cuenta que los planes PIMA de turismos han estado dotados con bastante menos dinero, es verdad que ha habido cinco seguidos, pero se han ido dotando con alrededor de 100 millones de euros, algunos 75 millones de euros, otros 170 millones de euros, y que han supuesto una subvención de unos1.000 euros por turismo mas otros mil que aportaba la marca como incentivo de compra, no se entiende que ahora 400 millones de golpe para financiación solo fuesen destinados a tan pocos vehículos.
Teniendo en cuenta la gran disparidad que hay entre el precio de una furgoneta de una tonelada de carga útil y una tractora de cuarenta toneladas, no se puede hacer una media eficaz del precio por vehículo teniendo en cuenta que se venden más furgonetas que camiones de más de 6 toneladas donde estamos alrededor de los 14.000 camiones.
Pero evidentemente para que sea atractivo un Plan Pima Camiones con algún tipo de achatarramiento o cambio a vehículos menos contaminantes, va a necesitar en la furgonetas al menos llegar de los 2.000 euros de subvención sea de tipo de interés o a fondo perdido, o por el otro lado, en el caso de los camiones, se tendría que llegar a una cifra en torno a los 6.000 o 7.000 euros por camión pesado. Con estas cantidades, aún así los 400 millones de euros van a significar por lo menos que el programa Pima va a ser plurianual, es decir, para este año y el siguiente.
Aunque, estos planes Pima o Renove por lo menos en turismos hasta ahora se han dotado hasta que se han gastado y después a costa de presionar la industria, ha conseguido que hubiese una redotación presupuestaria y que se extendiese.
Ahora el Pima para los vehículos industriales que de salida es mucho mayor, casi triplica la media de los planes Pive de turismo, significaría que va haber una financiación más grande.
El tema está también en la forma de las ayudas, en si va haber alguna ayuda a fondo perdido como la que se hacía con los planes Pive de turismo, es decir una cantidad que aporta el Estado para achatarrar los vehículos pero en este caso, también, y siguiendo la información oficial se ha cifrado en 5 millones solamente para achatarramiento, lo cual da una cantidad ciertamente ridícula comparado con los 400 millones del Plan Pima general para el vehículo pesado.
Es decir, que el sector, el Ministerio, se mueve en la total incertidumbre porque no parece que tienen muy ajustadas las cifras de este Plan.
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