El pequeño movimiento requerido para operar un volante no parece mucho, pero cuando se repite 16,000 veces al día durante meses y años, no es sorprendente que a menudo cause tensión y lesiones que impidan que los conductores trabajen.
Es por eso que el mini volante en nuestras carretillas retráctiles fue un desarrollo tan importante. Muchas carretillas elevadoras utilizan un volante más grande, y lo colocan frente al conductor en el cuerpo de la carretilla, lo que requiere que alcancen la mano para usarlo. Con nuestra solución, el volante es mucho más pequeño e integrado en un reposabrazos ‘flotante’, que puede moverse hacia atrás y hacia adelante libremente a medida que el conductor mueve su brazo.
En lugar de tener que elevar el brazo y hacer movimientos más grandes para dirigir, el mini volante permite al conductor tener una postura completamente neutral, y hace que los movimientos necesarios para maniobrar sean mucho más pequeños.
Esto significa menos tensión en el cuerpo del conductor, lo que significa menos lesiones y una conducción más eficiente, lo que resulta en una mayor productividad y rentabilidad . Eso no es un mal resultado de una pequeña optimización ergonómica para los controles del conductor.
El volante es una cosa, pero hay muchas otras características comunes de las carretillas elevadoras que pueden optimizarse para hacerlas más cómodas, más eficientes y más fáciles de usar.