Ya se vieron las pocas ganas de Kallas y de sus funcionarios como Theologitis de recoger el testigo de aquella estadista que fue Loyola del Palacio ( Emmanuele Grimaldi dixit) y que se iban a acobardar a las primeras de cambio. Primero dejaron fue la estiba, luego poco a poco el resto de servicios portuarios. Todo un ejemplo de mal ejemplo desde la Comisión Europea, que quieren que se hagan reformas en los muelles, pero ellos no piensan mojarse, si acaso enviar denuncias anónimas al Tribunal de Luxemburgo. Eso si cobrar bien a fin de mes no se les olvida. Kallas se marcha en dos meses y se despide así.
Según Anave, el proyecto proponía liberalizar las operaciones portuarias en 319 puertos marítimos europeos considerados prioritarios y se ahorrarían 10.000 millones de euros en costes de aquí a 2030.
El Comité de Transportes del Parlamento Europeo, tras una primera votación que tuvo lugar el pasado 11 de febrero, tiene previsto pronunciarse los próximos días 17 o 18 de marzo respecto del proyecto de Reglamento sobre acceso al mercado de los servicios portuarios que la Comisión Europea (CE) presentó en mayo de 2013.
Sin embargo, según una fuente del Parlamento Europeo que recogen los diarios franceses “Le Marin” y www.ouestfrance-entreprises.com en un artículo idéntico, “La votación de la semana próxima no tendrá lugar, debido a la falta de acuerdo sobre un texto común entre los ponentes y el presidente de la Comisión de Transportes. Esta reunión era la última oportunidad para que el Parlamento pudiese adoptar el texto en sesión plenaria, última de esta legislatura, los días 17 y 18 de abril en Estrasburgo.”
El resultado, siempre según estas fuentes, es que el proyecto de Reglamento se pospondrá sine die y será la nueva CE, designada tras las próximas elecciones europeas, la que decida si volverá a retomar este proyecto, bajo esta u otra forma.
El proyecto, que el Comisario de Transportes y Vicepresidente de la CE Siim Kallas, presentó bajo el lema: “European ports: an engine for growth”, proponía liberalizar las operaciones portuarias en 319 puertos marítimos europeos considerados prioritarios y afirmaba que de este modo se ahorrarían 10.000 millones de euros en costes de aquí a 2030. Las citadas publicaciones francesas afirman que “Numerosas profesiones portuarias, empezando por los prácticos, se oponían. La estiba y los servicios al pasaje estaban excluidos del texto inicial de la Comisión, pero ciertos parlamentarios consideraban que se debían a la competencia todos los servicios, o ninguno. La Comisión había fracasado ya dos veces, en 2003 y 2006, en su intento de liberalizar los servicios portuarios.”
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